Cómo trabajar con un jefe autoritario y estrategias para superarlo

En el mundo laboral, cada jefe tiene su propio estilo de liderazgo que a menudo está influenciado por su personalidad más que por su formación profesional. Entre los diversos estilos de liderazgo que existen, uno de los más desafiantes es el liderazgo autoritario.

Si te encuentras en una situación en la que tienes un jefe de este tipo, no te preocupes, no has hecho nada malo, y existen técnicas que puedes utilizar para lidiar con él de manera efectiva y mantener tu cordura en el trabajo.

Diferentes estilos de liderazgo

Antes de profundizar en cómo manejar un jefe autoritario, es importante entender que existen varios estilos de liderazgo en el mundo laboral. Cada uno de estos estilos tiene sus características distintivas. Aquí te presentamos tres de ellos:

1. Liderazgo Autoritario: Un jefe autoritario tiende a dictar órdenes sin pedir opiniones o sugerencias a sus empleados. Puede ser un microgestor que supervisa cada detalle de tu trabajo de cerca.
2. Liderazgo Colaborador: Un jefe con un estilo colaborador valora la opinión de sus empleados y busca su participación antes de tomar decisiones. Explica las razones detrás de las tareas asignadas y fomenta el trabajo en equipo.
3. Liderazgo Sumiso: Un jefe sumiso suele carecer de confianza en sí mismo y tiende a delegar tareas sin mucha dirección o supervisión, a veces incluso haciendo el trabajo por los empleados si estos no lo realizan a tiempo.

Lidiar con un jefe autoritario

Si te encuentras trabajando con un jefe autoritario, aquí tienes algunas técnicas que pueden ayudarte a sobrellevar la situación:

Deja que gane el jefe

En diversas ocasiones, la estrategia más pragmática para abordar la dinámica de un superior de naturaleza autoritaria reside en la disposición de ceder y ejecutar las tareas conforme a sus deseos. La modificación del estilo de liderazgo de tu superior puede presentarse como una empresa complicada, por lo que, en muchas instancias, resulta más conveniente adherirse a sus indicaciones.

En el caso de que surja una perspectiva distinta, es recomendable intentar incorporarla de manera coherente en el marco de su enfoque predominante. Si esta tentativa no culmina en resultados favorables, la opción más aconsejable continúa siendo la de seguir rigurosamente las directrices establecidas por el líder.

Ofrece tu apoyo

Si decides seguir las instrucciones de su superior, es importante explicar detalladamente su plan para llevar a cabo la tarea en cuestión. Este enfoque no solo demuestra su compromiso y profesionalismo, sino que también permite que su jefe se sienta más empoderado y en control de la situación.

Este aspecto es particularmente crucial cuando se trata de líderes que adoptan un enfoque autoritario en su liderazgo, ya que su participación activa y su disposición para compartir su estrategia pueden fortalecer la relación laboral y contribuir al éxito del proyecto. En última instancia, la comunicación efectiva y la colaboración son esenciales para lograr los objetivos de manera eficiente en cualquier entorno laboral.

300Haz preguntas dirigidas

Si te topas con un jefe que se las da de autoritario, pero no sabe mucho de ciertos temas, una estrategia inteligente es sacar a relucir tu experiencia a través de preguntas que lo hagan pensar. En vez de entrar en confrontación o proponer soluciones diferentes, plantea preguntas que lo conduzcan a contemplar tu punto de vista.

De esta manera, podrás mostrar tus conocimientos sin herir su ego, y tal vez incluso ayudarlo a entender mejor la situación. Después de todo, la comunicación es clave en cualquier ambiente laboral, ¡y quién sabe, quizás tus preguntas puedan abrir nuevas puertas de entendimiento!

Por ejemplo, si te asignan demasiado trabajo, en lugar de quejarte, podrías preguntar: “¿Puedo completar esta tarea para el jueves y luego abordar el proyecto de Smith?”. Este enfoque no es confrontativo y muestra que estás buscando una solución práctica.

No te lo tomes como algo personal

A veces, trabajar bajo un jefe autoritario puede ser un verdadero desafío, pero recuerda que su comportamiento no define tu valía como empleado. Estos jefes suelen tener egos bastante grandes y, a menudo, actúan de manera autoritaria debido a sus propias inseguridades.

Así que, en lugar de tomarlo como un ataque personal, lo mejor que puedes hacer es mantener tu actitud profesional. Mantén la cabeza alta, sigue haciendo tu trabajo de la mejor manera posible y, con el tiempo, es posible que puedas encontrar formas de manejar esa dinámica complicada de manera más efectiva.

Concéntrate en tu trabajo

Trabajar con un jefe autoritario puede ser como escalar una montaña empinada, pero no te preocupes, no es imposible. Siempre puedes recurrir a algunas técnicas para hacerlo más llevadero.

En primer lugar, trata de comunicarte de manera clara y respetuosa con tu jefe, expresando tus ideas y preocupaciones de manera profesional. También es importante mantener una actitud positiva, incluso cuando las cosas se pongan difíciles, ya que eso puede ayudar a suavizar las tensiones.

Además, busca oportunidades para aprender y crecer en tu trabajo, pues esto puede ser una forma de ganarte la confianza de tu jefe. En última instancia, recuerda que estás ahí para mantener tu trabajo y tu cordura en un ambiente laboral desafiante, así que mantén la calma y sigue adelante.

​Evitar peleas

En ocasiones, enfrentarse a un líder autocrático puede resultar sumamente frustrante y desafiante. Es comprensible que las diferencias de opinión y los desacuerdos puedan exacerbar los ánimos, llevando a la tentación de entrar en conflictos.

Sin embargo, en situaciones como estas, es esencial recordar la importancia de mantener la calma y la compostura. Centrarse en las tareas asignadas y mantener un enfoque profesional y respetuoso en todo momento se convierten en herramientas fundamentales para gestionar eficazmente estas dinámicas.

Si a pesar de ello, la situación persiste como un problema continuo, es recomendable considerar la posibilidad de limitar las interacciones con líderes autocráticos en la medida de lo posible, con el fin de preservar un ambiente de trabajo más saludable y productivo.

 No te pongas a la defensiva

Es importante reconocer que existe una percepción común de que los líderes autocráticos tienen la tendencia de aprovecharse de aquellos que consideran más débiles en su organización. Sin embargo, es esencial entender que esta percepción puede no siempre reflejar la realidad.

En muchos casos, lo que ocurre es que la capacidad de resistencia y adaptación de los individuos frente a este tipo de liderazgo es más evidente. Si un empleado está cumpliendo con las tareas asignadas de manera efectiva y considera que su desempeño es satisfactorio, puede optar por mantener una comunicación asertiva y profesional con un líder autocrático sin caer en la falta de respeto.

La clave reside en encontrar un equilibrio que permita la colaboración efectiva y la expresión de ideas constructivas dentro de un ambiente de trabajo.

Conclusión

En el universo laboral, lidiar con un jefe autoritario puede representar un auténtico desafío. Este tipo de líderes pueden generar ambientes de trabajo tensos y estresantes, y es natural sentirse abrumado en algunas ocasiones.

Sin embargo, con las estrategias adecuadas, es posible navegar a través de esta dinámica de manera efectiva. Al mantener una postura profesional, ofrecer tu apoyo de manera proactiva, plantear preguntas inteligentes y no tomar su comportamiento autoritario de manera personal, puedes contribuir a un entorno laboral más productivo y saludable.

Finalmente, es crucial recordar que tu valor como profesional no está definido por la actitud de tu superior, sino por tu propio desempeño y compromiso. Recuerda que, en última instancia, tu objetivo es conservar tu trabajo y tu cordura durante más tiempo en un entorno laboral autoritario.